pescandoconbrandi

Mutriku

Aparque unos días junto al edificio naranja, perfecto para salir con el kayak y por las noches al txipi, menos mal que hay un ascensor para subir al pueblo.

Escondida al fondo hay una "piscina" que se comunica con el agua del mar, tiene chiringuito, duchas, fondo rocoso, peces, y demás visitantes, una chulada.

Por un anuncio en un bar, conocí a uno de la zona que hacia salidas de pesca en una rodman1250 y aunque era una pasta, me di el capricho, también venia una pareja de Catalanes que estaban de vacaciones.

Salimos temprano, sobre las 6 am, y como hasta la zona donde montaríamos los aparejos era casi una hora y había dormido "poco", me baje a uno de los camarotes a tumbarme un rato. Cuando escuche que el motor bajaba de revoluciones, subí a la velocidad del rayo y vi que el otro chico entraba en la cabina

- que Alex? al ataque!!!

- calla colega, estoy hecho polvo

Merche, su novia, me comento que se había mareado y no paraba de salir a la borda, no le esperaba un buen día de pesca al pobre.




Nunca había ido a pescar en embarcación y todo era nuevo, el montaje de las cañas, los señuelos..., y sobre todo los pedazo carretes que utilizamos.
En poco tiempo entro un bonito y ya me imaginaba una jornada llena de picadas y combates como en los videos de YouTube....pero no entraba nada mas.

El caso es que disfrutaba igualmente, era una buena mañana de verano y estaba pescando en un buen barco, tuvimos la suerte de ver muchos delfines jugando alrededor nuestro, aves marinas lanzándose en picado desde gran altura y también pudimos ver varias ballenas enormes resoplar, creo que eran cachalotes.
Cuando menos lo esperaba tres de las cañas marcaban buena picada y los carretes soltaban linea a toda pastilla, que subidon, cogí la caña que estaba frente a la silla de combate y el patrón se puso con Alex, que andaba algo zombi, ya que una de las piezas se habia soltado.
El Patrón era un artista, mientras ayudaba a Alex con la pieza, le daba instrucciones a Merche para que manejase el barco y me indicaba a mi que regulara el freno con mas fuerza. Al rato vimos la pieza de Alex, un precioso atún de 17 kilos que gancheo el patrón, y después el mio que peso 25 kilos, una experiencia inolvidable.